Aunque esté muy manida aquella frase que dice que “todo está inventado”, se puede seguir siendo creativo con la publicidad en medios tan convencionales como la radio.
La radio es el medio de comunicación más cercano, puesto que de los medios tradicionales, es el único que puede estar allá donde te encuentres; en la oficina, en el coche, en casa. Puedes escuchar la radio mientras realizas cualquier tarea, algo que no sucede con la televisión; medio al que además de dedicarle el sentido del oído, hay que sumarle el de la vista. Debes saber que la radio ha sido el medio que mejor se ha transformado al mundo digital. Antes, una emisora limitaba su cobertura a un dial y a una antena y su potencia desde la antena. Ahora, al emitir también por internet, su cobertura es ilimitada y por tanto, su audiencia crece significativamente.
¿Quién no recuerda escuchar a todo gas la lotería de navidad en todos los aparatos de radio de nuestra casa el 22 de diciembre?
También la radio tiene primetime. La retransmisión de la lotería de Navidad sería un buen ejemplo. Aunque apartando esos programas o retransmisiones puntuales, suelen ser los programas matinales los más escuchados.
Los anuncios tienen que ser diferentes unos de otros dentro del ruido de una misma desconexión publicitaria y no sonar todo igual. Hay recursos para hacerlos diferentes; la voz, el género, el tono, la música que los acompaña, los efectos de sonido, los silencios o blancos,… Dar rienda suelta a la creatividad.
Hay que cuidar al máximo la inversión publicitaria de cada marca. Escucha a otras empresas de tu misma actividad económica en las emisoras de radio para ver qué hacen, como se presentan hacia la audiencia. Es una especie de monitorización, ahora también en emisión digital. Es fundamental saber qué te hace diferente de tus competidores. Si lo tienes claro, y conociendo tu ventaja competitiva, utiliza otros formatos para estar aún más diferenciado. Jugar con formatos diferentes puede ser interesante.
En radio puedes, desde realizar un programa en directo desde tu empresa y para toda la audiencia, hasta patrocinar un espacio que conecte con tu público objetivo.
La creatividad en la publicidad está siempre viva y el marketing te ofrece numerosas estrategias; puedes incentivar a tu audiencia, hacerle viajar a través de las experiencias, transportarlo al pasado, al recuerdo, conectar con sus sentimientos. Busca un buen equipo creativo que sepa comunicar los valores de tu marca de forma ingeniosa.
¿Cómo aprovechar la publicidad tradicional en radio como contenido digital?
Si tu marca tiene presencia en programas radiofónicos, puedes editar los audios (entrevistas, cuñas, microespacios…), subirlos a tu blog corporativo, y darles una mayor entrada y difusión a través de las redes sociales (Facebook, Twitter…) Puedes utilizar herramientas muy fáciles y rápidas como Audacity.
Así de sencillo puedes digitalizar tus contenidos utilizados en medios tradicionales como la radio. Otra cosa será medir la calidad de lo que ofreces.
Ahora, veamos desde el otro lado cómo puede una emisora de radio subirse al carro de las nuevas tecnologías y sacarle el mayor partido.
Es muy probable que una cadena o emisora de radio tenga su propia página web y que desde ella no sólo pueda escucharse una programación online en cadena o rescatar lo más escuchado, sino también encontrar la opción de sintonizar la frecuencia local que escuchas habitualmente en tu ciudad. Esto es un valor añadido a tu inversión en radio, puesto que estás utilizando otro canal más de difusión.
Los contenidos de un magazine se pueden adelantar en las redes sociales y más tarde desarrollarlos en formato de entrevistas o informativos. Utiliza bien esas redes sociales, ya que puedes citar a cada participante, contertulio, entrevistado, cliente o anunciante y hacerlo así más viral.
Estos son algunos ejemplos de creatividad y cómo sacarle provecho a las nuevas tecnologías sin estar rivalizando, sino caminando de la mano. ¿Inviertes en medios tradicionales? ¿Cómo optimizas tu inversión? Me encantará leer tu aportación.
Os hablaré en otra entrada del maravilloso mundo del podcast.